Cómo cultivar la hierba sirena (Proserpinaca palustris)

La Proserpinaca palustris, conocida en el comercio como hierba sirena, se encuentra en la naturaleza tanto en Norteamérica como en Sudamérica. Aunque lleva mucho tiempo en la afición, nunca ha sido muy popular entre los aficionados, quizá debido a su gran tamaño o a la dificultad de conseguir que crezca bien.

El color de la Proserpinaca palustris oscila entre el verdoso y el rojo anaranjado. Es una planta pedunculada que puede llegar a alcanzar la altura de acuarios grandes, con una circunferencia de unos 5 a 10 cm en su tamaño completo. Tiene hojas claramente dentadas que le dan un atractivo aspecto de dientes de sierra. Puede utilizarse como atractiva planta de medio fondo o de fondo. Su gran tamaño en la madurez la hace más adecuada para acuarios grandes. Su amplia copa le permite dar sombra a las zonas circundantes.

Las diferencias varietales explican en parte por qué algunas plantas tienen hojas más finamente divididas. En general, las plantas bien alimentadas y con acceso a altos niveles de CO2 tienen hojas más gruesas.

Afortunadamente no es una planta de crecimiento rápido, crece a un ritmo moderado, aunque se hará grande con el tiempo. A diferencia de muchos otros tallos, esta planta no produce muchos brotes laterales a medida que crece. Aunque se puede podar recta, desechando la parte superior y dejando que la parte inferior del tallo produzca brotes laterales, suele ser más limpio cortar la parte superior y volver a plantar, desechando la parte inferior. Esta planta empezará a tener un aspecto muy desordenado si se repite la poda recta. Si se corta y se vuelve a plantar la parte superior y los brotes laterales que broten, se obtendrá un arbusto más ordenado.

La hierba sirena prefiere un acuario con mucha luz. Necesita una PAR elevada (más de 100 umoles) junto con un espectro rojo/azul más intenso para obtener sus mejores colores. También prefiere niveles elevados de CO2 y de nutrientes: la falta de éstos hará que la planta sea más delgada y pequeña. Existe una estrecha correlación entre la disponibilidad de CO2/nutrientes y el tamaño total de la planta, lo que la convierte en una buena planta indicadora de estos factores.

Puede crecer en acuarios de baja tecnología con niveles de luz más altos, pero la planta será delgada.

Factores clave del éxito

• Luz intensa necesaria para tener buena forma y coloración.

• Prefiere mayores niveles de CO2 y nutrientes (sustrato rico o mayores niveles de dosificación en la columna de agua).

• No es exigente con la dureza del agua, puede cultivarse en aguas duras.

Cómo propagar

Corta la parte superior y vuelve a plantar, dejando la parte inferior enraizada para que crezcan nuevos brotes. La planta producirá brotes laterales de forma natural a medida que crezca. Éstos pueden cortarse y replantarse en otro lugar.